ONU pide a comunidad internacional no olvidarse de Siria

“El actual estancamiento estratégico sobre el terreno y la ausencia de Siria en los titulares no deben inducir a nadie a pensar que el conflicto necesita menos atención o menos recursos, o que una solución política no es urgente”, señaló Geir Pedersen, enviado de la ONU para Siria.

Siria es “un conflicto activo, no congelado”, afirmó el martes el enviado de la ONU para Siria, Geir Pedersen, en su última sesión informativa ante el Consejo de Seguridad en Nueva York.

A pesar de que la agenda mediática se ha enfocado últimamente en la guerra de Ucrania, Pedersen pide a la comunidad internacional que no pierda de vista la guerra de Siria, pues afirmó que se necesita encontrar una solución política global.

Pedersen recordó que la crisis en Siria no ha terminado. En la sesión informativa ante el Consejo de Seguridad de la ONU, enumeró algunas de las amenazas derivadas de la guerra, como el aumento de los ataques aéreos, la intensificación de los enfrentamientos en el noreste del país, los “incidentes regulares entre actores internacionales o con su participación”, así como el terrorismo.

“El actual estancamiento estratégico sobre el terreno y la ausencia de Siria en los titulares no deben inducir a nadie a pensar que el conflicto necesita menos atención o menos recursos, o que una solución política no es urgente”.

¿Qué sucede en Siria?

El conflicto militar en Siria que estalló en 2011, entre el gobierno y  la oposición siria, que incluía a varios grupos terroristas, desencadenó una de las mayores crisis humanitarias de la historia.  Además de acabar con la vida de entre 300, 000 y 470, 000 personas, ha obligado a más de 6.8 millones de sirios buscar refugio en otros países y otros 6.2 millones a desplazarse internamente.

La jefa adjunta de Asuntos Humanitarios de la ONU, Joyce Msuya, que también informó a los embajadores, advirtió que “Siria está a punto de convertirse en otra crisis olvidada”, mientras millones de personas luchan cada mes por sobrevivir.

Msuya informó sobre la escasez de recursos de los trabajadores humanitarios.

“Sencillamente, no tenemos el dinero necesario. Son demasiadas personas y no podemos proporcionar el mínimo de asistencia. Está claro que no podemos seguir como hasta ahora. Debemos apoyar a los sirios que lo necesitan para encontrar un camino más sostenible hacia adelante”.

En los últimos meses, tres convoyes transfronterizos han entregado ayuda en el noroeste de Siria, donde más de cuatro millones de personas necesitan ayuda, y se espera que haya más despliegues en mayo. Mysuya aseguró que no es suficiente.

Igualmente, Pedersen informó sobre el avance del Comité Constitucional Sirio, que busca encontrar una solución pacífica de la guerra y a una futura reforma política. Durante su última sesión, celebrada en Ginebra el mes pasado, las delegaciones debían presentar textos revisados que reflejaran sus debates, y las revisiones debían ser debatidas por los miembros del Comité el último día.

“Puedo informar de que las delegaciones ofrecieron al menos algunas revisiones de algunos de los textos presentados. Algunos de ellos incluían enmiendas que indicaban un intento de reflejar el contenido de los debates y reducir las diferencias. Sin embargo, otros no contenían ningún cambio”.

Naciones Unidas espera que el Comité vuelva reunirse del 28 de mayo al 3 de junio para continuar con las negociaciones y acuerdos.